Si hace un tiempo te contamos cómo los biocarburantes elaborados con aceites vegetales reciclados habían comenzado a utilizarse en vehículos como la furgoneta Ford Transit, hoy vamos un paso más allá en cuanto a medios de transporte se refiere: los aviones.
Efectivamente, el biocarburante de aceite vegetal usado hidrotratado (HVO) ha llegado al mundo de la aeronáutica y parece que para quedarse. Si un cambio en el modelo energético es clave para evitar el uso de combustibles fósiles y reducir la emisión de gases de efecto invernadero, es lógico que este se aplique también a medios de transporte tan contaminantes como son los aviones. Te contamos más a continuación.
Un cambio en el paradigma energético
El panorama energético ha cambiado. El gran impulso de la biotecnología, sumado al apoyo de políticas públicas que premian el consumo de carburantes elaborados a partir de aceites reciclados, está consiguiendo que el uso de estos combustibles se extienda.
Es el caso de las flotas de aviones que comienzan a utilizar el llamado biocombustible de segunda generación en sus vuelos regulares.
Aunque será partir del año 2030 cuando España y su Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) obligue a que un 28 % de la energía que se utilizan en medios de transporte sea renovable. Y dentro de toda la gama de energías renovables, el biocarburante se presenta como una de las propuestas más sólidas por muchos motivos.
Será entonces cuando el uso de los biocombustibles se haga más extensible y estos empiecen a demostrar realmente todo su potencial energético. Si ya comienzan a estar presentes como carburante para aviones, este uso irá a más y a partir de ese año serán habituales también en otros sectores como el transporte marítimo.
Las grandes posibilidades del HVO como carburante para aviones
Como sabes, estos biocarburantes están elaborados, principalmente, a partir de residuos de biomasa, de aceites de cocina reciclados y de grasas animales.
Que se conviertan en una de las fuentes energéticas renovables más utilizada a corto plazo se debe a varios motivos. Por un lado, a que estos biocarburantes desprenden un 95 % menos de emisiones de dióxido de carbono que los carburantes elaborados con petróleo. Y por otro lado, porque su huella de carbono es menos dañina para el medioambiente, además de que no contienen azufre ni oxígeno.
Uno de los factores que favorecerán la capacidad de elaborar biocombustibles a mayor escala será el impulso de la producción de biocarburantes de aceite vegetal usado hidrotratado (HVO). Aunque el consumo de HVO en España en los últimos años ronda las 300.000 toneladas, es más que probable que la cifra aumente a medio plazo debido a la puesta en marcha de nuevas plantas en todo el mundo.
Pero para que esto ocurra, es fundamental la aportación de empresas como Reacus que se dedican a la recogida de aceites usados de cocinas en Madrid. Llámanos si quieres contribuir a que se consolide este nuevo modelo energético por medio del reciclaje del aceite que utilizas en casa.