Ya sabes que nos gusta estar pendientes de todas aquellas noticias relacionadas con el reciclaje y la sostenibilidad para compartirlas en este espacio. Y hoy queremos traerte un tema que avanza imparable desde su aprobación por el Gobierno de España en noviembre de 2020. Nos estamos refiriendo al Plan de Descarbonización a Largo Plazo que tiene fijada su meta en el año 2050, aunque cuenta con unas metas intermedias en 2030.
¿Quieres saber cuáles son los objetivos finales de esta estrategia? Pues no dejes de leer este post en el que te lo contamos.
Objetivos del Plan de Descarbonización
Los objetivos que pretende alcanzar este plan en un plazo de 30 años son tan claros como necesarios teniendo en cuenta cómo nuestras acciones están perjudicando al planeta:
- Reducir un 90 % las emisiones de gases de efecto invernadero con respecto a las emisiones que había en 1990.
- Reducir las emisiones de CO2 de las 334 millones de toneladas emitidas en 2018 a un máximo de 29 toneladas.
- Alcanzar la neutralidad climática.
Aun así, como ejercicio de control para evaluar si vamos por el buen camino, esta Estrategia de Descarbonización a Largo Plazo tiene unas metas intermedias revisables en el año 2030. En ese momento se deben haber conseguido ya estos avances:
- Reducir las emisiones de gases efecto invernadero un 23 % respecto a las emisiones que había en 1990.
- Lograr que el 74 % de la electricidad generada proceda de fuentes renovables.
- Lograr que el 42 % del consumo energético final provenga de fuentes renovables.
- Mejorar la eficiencia energética de hogares y empresas en un 39,5 %.
En definitiva, la Estrategia de Descarbonización a Largo Plazo (ELP 2050) marca la hoja de ruta a seguir para alcanzar esos objetivos descritos que nos llevarán a la neutralidad climática. Esta aumentará la competitividad de nuestro país, repercutirá positivamente en la salud de las personas, favorecerá la biodiversidad, frenará el cambio climático y contribuirá a una mejor conservación y sostenibilidad del entorno.
El papel de la transición energética
Fomentar la movilidad sostenible, promover el consumo energético responsable, impulsar la economía circular o dar el salto a fuentes de energía renovables son gestos claves para alcanzar ese objetivo general de cero emisiones de carbono.
Aunque la gran aliada para lograrlo es la transición energética que hará destacar nuevos vectores energéticos como el uso del hidrógeno renovable o el uso de combustibles sostenibles como los combustibles sintéticos o los biocombustibles que se elaboran con aceites usados reciclados. Por eso, la labor de empresas autorizada en su recogida y reciclaje como Reacus son tan importantes en la cadena de medidas que deben tomarse para conseguir esta descarbonización.
Si regentas un bar, un restaurante, una empresa de catering… no olvides que contamos con un servicio de recogida de aceite usado de hostelería en Madrid. Nos encargamos de todo el proceso: colocamos en tu negocio contenedores especiales de recogida, supervisamos su almacenaje y lo retiramos periódicamente para su reciclado. Llámanos si quieres formar parte de esta estrategia que nos beneficia a todos.